El tema de las manipulaciones genéticas en animales tiene una nueva controversia, y es que una especie de gato se ha convertido en un índice de status y lujo. El gato Ashera, un felino creado de manera artificial hace unos años, tiene un valor de 100.000 euros, y una larga lista de espera para todo aquel que quiera un ejemplar.
El laboratorio Lifestyle Pets, que hace cruces genéticos desde hace dos décadas, es el encargado de crear en sus laboratorios al peculiar gato, y mezclando genes del serval africano, el leopardo asiático y el gato común fue que logró dar con esta especie.
Lifestyle Pets sólo produce 100 de estos felinos por año, que además son estériles producto de su mezcla genética, por lo cual es imposible cruzarlos entre si, debido a esto la lista de espera que se tiene para conseguir un gato Ashera es larguísima, casi tanto como la cantidad de críticas que reciben tanto el laboratorio como sus compradores, al grado de que la Federación Internacional Felina no lo reconoce como una raza.