El presidente del Poder Judicial de Nuevo León, Arturo Salinas Garza, manifestó su desacuerdo con la elección de jueces y magistrados mediante voto popular, señalando que este método ha mostrado deficiencias en otros países de Centro y Sudamérica. Sin embargo, aseguró que el Poder Judicial acatará la reciente decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que avala esta medida.
Salinas Garza explicó que, en Nuevo León, la reforma judicial requerirá un proceso de doble votación. La Constitución del Estado exige que cualquier reforma constitucional pase primero por una aprobación preliminar para su discusión pública y luego se someta a una votación definitiva que requiere mayoría calificada.
El proyecto de invalidación de la reforma, impulsado por el ministro Alcántara Carrancá, no obtuvo los ocho votos necesarios en la SCJN, quedando con solo cuatro votos a favor. Con esta decisión, la elección de jueces y magistrados por voto directo sigue en pie, y el Poder Judicial en Nuevo León se adaptará para cumplir con esta ley.